INFRAESTRUCTURAS EDUCATIVAS

Universidad de Zaragoza | La reforma del campus Río Ebro se licitará este año y tendrá sobrecoste

Las obras comenzarán en 2025 y contemplan la transformación del entorno con la supresión de aparcamientos para crear dos bosques y carriles bici

Se quiere actuar sobre 30.000 metros de asfalto y aceras para transformarlos en naturaleza

Inmediaciones del edificio Betancourt del campus Río Ebro, por donde discurrirá uno de los bosques.

Inmediaciones del edificio Betancourt del campus Río Ebro, por donde discurrirá uno de los bosques. / JAIME GALINDO

Ana Lahoz

Ana Lahoz

El proyecto para transformar el campus Río Ebro de la Universidad de Zaragoza en un gran entorno verde no ha caído en el olvido, a pesar de que el inicio de las obras se había anunciado en un principio para finales de 2023. Han sido las cuestiones administraciones las que han demorado los plazos, de tal modo que la reforma se licitará «antes del verano» y las obras empezarán en 2025. Eso sí, tendrán un sobrecoste de acuerdo a lo planteado en un principio. «Lo habíamos previsto en una licitación de un millón y medio, pero subirá más. Es una inversión alta y no me atrevo a dar cifras, pero todo se ha incrementado y lo notaremos», explica a este diario Ángel Pueyo, vicerrector de Planificación, Sostenibilidad e Infraestructura de la Universidad de Zaragoza.

El proyecto, para el cual ya hay prevista una partida de 650.000 euros en los presupuestos de 2024, se enmarca dentro del objetivo de crear una universidad verde, accesible y abierta. Todo bajo el marco del convenio de financiación entre el Gobierno de Aragón y la universidad.

La transformación del campus Río Ebro supondrá actuar sobre una zona de 80 hectáreas y en la que se trabajará en dos líneas fundamentales: la creación de dos bosques de más de 40.000 metros cuadrados y la habilitación de carriles bici que conecten la zona universitaria con el barrio de Parque Goya. Así figura en el plan previo sobre el que se está trabajando y sobre el cual se ejecutará un plan director, pendiente de asignar.

El proyecto contempla la supresión de hasta 500 plazas de parquin.

El proyecto contempla la supresión de hasta 500 plazas de parquin. / JAIME GALINDO

De acuerdo a dicha información, a la que ha tenido acceso este diario, se quiere actuar sobre 30.000 metros de asfalto y aceras para transformarlos en naturaleza. De este modo, se suprimirán alrededor de 500 plazas de parquin en diferentes puntos del campus como el edificio Ada Byron para crear esos dos bosques que «abrazarán» diferentes infraestructuras del recinto, según explica Pueyo. Estas futuras zonas verdes guardan conexión con el Bosque de los Zaragozanos, la iniciativa del Ayuntamiento de Zaragoza, de tal modo que los espacios del campus se unirán al proyecto municipal. De hecho, la Universidad de Zaragoza ya está trabajando con Parque y Jardines para elaborar un listado de las especies de árboles que se colocarán en todo el recinto.

De este modo, el proyecto incluye la revegetación de 41 hectáreas con plantas autóctonas adaptadas al clima local, con reducción del consumo del agua hasta en un 75%. Además, se prevé la utilización de técnicas eficientes, como el riego por goteo o la captación ya existente y la reutilización de agua de lluvia al evitar la escorrentía y evaporación, que reducirá el actual consumo de agua en los espacios verdes urbanos.

El proyecto incluye la revegetación de 41 hectáreas con plantas autóctonas adaptadas al clima local, con reducción del consumo del agua hasta en un 75%. Además, se prevé la utilización de técnicas eficientes, como el riego por goteo.

La reforma del campus Río Ebro empezará en las inmediaciones de los edificios Lorenzo Normante y Torres Quevedo, donde se creará un espacio más arbolado y se diseñarán zonas deportivas. Una segunda parte «más compleja» será la que se desarrolle en los edificios de I+D+i, donde se tiene que retirar «más volumen de cemento», correspondiente a los aparcamientos para ubicar ahí parte de uno de los bosques.

En entorno del edificio del Circe también será revegetado.

En entorno del edificio del Circe también será revegetado. / JAIME GALINDO

La presencia de los dos bosques hará que la humedad relativa del aire aumente entre un 10% y 15% de acuerdo a este proyecto. «La presencia de árboles y vegetación tendrá un impacto significativo, especialmente en clima mediterráneos como el nuestro, con olas de calor cada vez más numerosas y secos durante el verano», se añade el anteproyecto.

Mejora de la movilidad

Por otro lado, el proyecto sobre el que se va a diseñar el plan director también contempla la mejora de los accesos al campus y la creación de un carril bici que conecte la zona del Torres Quevedo con Parque Goya. Esta actuación se hará antes del inicio de la reforma del campus.

Mientras tanto, la universidad y la DGA siguen «reflexionando» sobre cómo transformar los campus San Francisco y el de Veterinaria, ambos en Zaragoza, en los cuales también se quiere aplicar ese concepto de universidad verde y accesible. En el caso de Veterinaria, su reforma «puede ser paralela» a la de Río Ebro, según el vicerrector. «La idea es tender a la pacificación de vías en todos los campus, con más zonas verdes y menos cemento, en colaboración con el ayuntamiento y el Gobierno de Aragón», añade Pueyo

Suscríbete para seguir leyendo